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Recomendaciones para el estrés laboral


En algún momento de nuestra vida, hemos podido experimentar estrés en el trabajo. Este fenómeno, se puede dar de manera puntual como parte de nuestro trabajo (por ejemplo, ciertos administrativos en épocas de matrícula donde el nivel de trabajo se eleva) o como algo que perdura en el tiempo y se convierte en algo crónico y a largo plazo, lo que puede ocasionar altos niveles de ansiedad y tensión.

Se trata de una condición que se está convirtiendo realmente en un serio problema y que cada vez se manifiesta en más personas, en parte, por el uso y el control del trabajo a través de las nuevas tecnologías.

Las consecuencias que se pueden dar, entre otras son: depresión, insomnio, adicción a medicamentos, etc.

A niveles más físicos: accidentes cardiovasculares, reacciones cutáneas, etc.

Como consecuencia, personas que experimentan estos problemas de salud, desarrollan ciertas conductas para paliar la situación y soportar mejor el estrés: fumar, beber cantidades excesivas de alcohol, medicación...

Entre los factores desencadenantes y mantenedores del estrés laboral se encuentran:

  • Percibir un bajo salario en comparación con el tipo de trabajo

  • Soportar cargas de trabajo excesivas

  • Falta de control en la toma de decisiones, entre otros.

Debido a este incremento de casos a largo plazo y sus devastadores consecuencias, la APA (American Psychological Association), ha establecido una serie de recomendaciones para enfrentarse a este fenómeno de la sociedad moderrna.

  1. Identificar cuáles son los estresores realizando registros con toda la información posible

  2. Desarrollar respuestas saludables: hacer ejecicio, empeszar a realizar conductas saludables respecto a la higiene del sueño, etc.

  3. Establecer límites: Establecer la línea clara entre trabajo y vida personal. Como ehemos comentado anteriormente, las nuevas tecnologías y redes sociales nos obligan a permanecer conectados permamenentemente al trabajo, sin darnos la oportunidad de desconectar y dedicarnos a otras áreas de nuestra vida. Hay que disminuir el porcentaje de ocupación y responsabilidad y repartirlo.

  4. Tomarse un tiempo para "Recargarse": Volviendo a nuestro nivel de funcionamiento antes del episodio estresante.

  5. Aprender a relajarse: tomando clases de mindfullness, yoga, o sis e desea cualquier deporte liberador de adrenalina.

  6. Hablar con nuestro supervisor: En ocasiones, no nos atrevemos a hablar con el superior por miedo a represalias o porque damos por hecho que no nos harán caso. Nada de eso. Desde la asertividad podemos comentarle al supervisor nuestra situación y que, con el fin de poder rendir más eficientemente, requerimos cubrir ciertas necesidades. No tengáis miedo a exponer vuestros problemas ni déis por hecho nada.

  7. Buscar apoyo: de familiares, otros compañeros de trabajo, amigos, asociaciones, etc. Además, estaría bien averiguar si la empresa cuenta con recursos profesionales para tratar desde dentro estos aspectos psciológicos.

Para personas que aún así, se sieguen sintiendo abrumadas, lo conveniente es acudir a un profesional de la Psicología experto en la temática, pues en ocasiones no basta con estas recomendaciones y se requiere tocar aspectos más profundos.

Fuente: Infocop, 67

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